domingo, 27 de junio de 2010

Solo un sueño


Fue solamente un sueño, aquel en el que estábamos tomados de la mano, caminando en una hermosa playa a la luz de la Luna y con el hermoso cielo estrellado. Era una hermosa noche tibia con algo de brisa refrescante del mar, una noche callada al igual que nosotros, que solamente nos limitábamos a vernos mutuamente entre reojos y miradas furtivas.

Era solo un sueño y yo sabía perfectamente que lo era, más no quería despertar de él. Sentía que tenía mucho tiempo sin verte y que si te dejaba ir, por el hecho de saber que era un sueño al despertar me despertaría con un enorme hueco interior, deseando haberte disfrutado más un poco más aún en ese estado.

Después al caminar volteaste hacia mí con una sonrisa, no basta decir que era de “ensueño” (ya que en realidad era un sueño; más bien sería propio decir que, esa sonrisa es mucho más bella en persona; es la más hermosa que jamás haya visto, fue una sonrisa sincera, llena de amor, transparente y hacia juego con tus ojos… una sonrisa que ojalá pudiera presenciar durante una eternidad latente en mí). Después me dijiste Preciosa mira hacia arriba, mira la Luna está enorme, hay que sentarnos a presenciarla un momento y la luz de la Luna iluminaba tu rostro sonriente y yo sentí mi corazón palpitar tan rápido que sentía que no había nada más perfecto que ese momento en toda mi vida.

Tomé tu rostro con mis dos manos te miré directamente a los ojos y te dije Corazón, por favor no me dejes, sé que no me entiendes, sé que es un sueño; ojalá siempre fuese así y besé tus labios y tomaste mi cintura, me jalaste hacia ti y dijiste. "Solo sé que estoy pensando en ti".
Y desperté, desperté de ese sueño, suspirando y sintiéndome querida, protegida y llena de tanto amor por dar, llena de sueños de muchos de ellos; esperando un día conseguirlos. l+

miércoles, 23 de junio de 2010

Paz interior


Con tu llegada has traído contigo como regalo una paz interior a mi vida que hace mucho tiempo no encontraba, tus dulces besos, tus abrazos, las miradas eternas y los temas de plática que siempre terminan con una hermosa sonrisa que pudiera deslumbrar eternamente mi existencia…

Es como haber reencontrado en mí el sentimiento de serenidad interior, el poder nuevamente escuchar y sentir el palpitar pausado de mi corazón… el correr la sangre de mis venas, el reír nuevamente sin importar que salga una línea de expresión en mi rostro, el ver desde otra perspectiva mis días, mi vida…

El decir gracias no basta, es una palabra que quedaría y queda demasiado corta hacia ti. Por el tiempo dedicado en distancia física en distancia espacial mas no emocional, te digo sinceramente te quiero, te quiero mucho…

miércoles, 16 de junio de 2010

No llores...




Puedo escucharte llorar a lo lejos y tus sollozos pausados que tratas de callar. Sé que estás llorando amargamente y que tus lágrimas corren sin cesar; sé que cada día al amanecer finges que no ha pasado nada y sonríes como siempre, hasta pareciera que eres feliz; por lo menos eso tratas de aparentar, pero a mí aunque es corta mi edad no puedes engañarme. Se leer tus ojos, miro la tristeza en ellos, nos conocemos hace pocos años, pero tú eres mi madre desde que yo soy tu hija y ambas sabemos que conocemos.



Hoy es otra noche más, en la que lloras y haces que mi corazón se quiebre; en esta noche tuve el valor para ir hacia tu habitación y no solamente quedarme ahí sentada acariciando la puerta, tratando de que sintieras con ello que yo estaba ahí contigo. Ahora, abrí tu puerta; tú llorabas sentada al borde tu cama con las manos en la cara y yo recuerdo que te dije. Mami ven conmigo, no llores más, ven a dormir conmigo prometo abrazarte a ti toda la noche en vez de a mí muñeca, pero por favor no llores más que estoy a tu lado siempre… y, desde esa noche, cada vez que ella se encuentra triste o no puede dormir, sabe que en esos momentos y siempre, ella cuenta conmigo.